La transubstanciación, una palabra desconocida para la mayoría de la gente, es una doctrina católica que sostiene que durante la celebración de la Eucaristía, el pan y el vino consagrados se convierten de manera misteriosa y milagrosa en el cuerpo y la sangre de Jesucristo. La transubstanciación se basa en la interpretación literal de las palabras de Jesús en el Evangelio de Juan: «Este es mi cuerpo», y «Este es mi sangre», que Jesús dijo al instituir la Eucaristía durante la Última Cena. Los católicos creen que la transubstanciación es una manifestación de la presencia real de Jesucristo en la Eucaristía.
La transubstanciación es una creencia importante en la teología católica y es uno de los dogmas de la Iglesia Católica Romana. Los católicos creen que durante la celebración de la Misa, el sacerdote consagra el pan y el vino, pronunciando las palabras de consagración sobre ellos. Según la creencia de la transubstanciación, el pan y el vino se convierten milagrosamente en el cuerpo y la sangre de Jesucristo. Esto es lo que se conoce como el «milagro de la transubstanciación».
Los católicos creen que la presencia de Jesucristo en la Eucaristía es real y que se manifiesta de manera misteriosa a través de la transubstanciación. Los católicos también creen que al recibir el cuerpo y la sangre de Jesucristo en la Eucaristía, están unidos de manera más estrecha a él y que reciben gracia y fortaleza espiritual.
